Debe consultar a su médico siempre que presente molestias digestivas. La gran mayoría de las veces carecerán de importancia y ni siquiera precisan una evaluación preferente ni urgente. Las podrá resolver incluso sin necesidad de consulta presencial.
Consulte con su médico sin demora en los siguientes casos
- Dolor de estómago o en el resto del abdomen que le despierta por la noche
- Presenta vómitos
- Está perdiendo peso o apetito
- Dificultad progresiva para deglutir (disfagia). Se le queda la comida “parada” en el esófago e incluso precisa expulsarla de nuevo
- Dolor durante la deglución de alimentos
- Nota más cansancio del habitual
- Le han detectado anemia, sin una causa evidente
- Vomita sangre (generalmente como poso de café)
- Diarrea de más de 1 mes de duración, sobre todo si le ocurre por la noche
- Nota las heces con sangre o de color negro (como el alquitrán) especialmente pegajosas y malolientes (melenas, heces melénicas). El ácido clorhídrico torna las heces de color negro y por ello si la sangre proviene del estómago o de tramos altos del intestino delgado es de color negro y no roja.
- No se confíe cuando note sangre en las heces aunque esté diagnosticado de hemorroides, sobre todo si su edad es mayor de 50 años
- Antecedentes familiares de cáncer del aparato digestivo
- Cirugía previa en el estómago
- Ictericia (coloración amarilla de la piel y conjuntiva)
- Se palpa una masa en el abdomen o ganglios (en el cuello, las axilas o las regiones inguinales).
- El test de sangre oculta en heces es positivo
La necesariamente tiene que padecer un tumor maligno u otra enfermedad grave en estas situaciones, pero no debe retrasar la consulta médica . Si se tratado de algo importante, es preferible tratarlo lo antes posible.
Síntomas como el dolor nocturno, la pérdida de apetito y de peso, la coloración amarilla de las conjuntivas, la palpación de una masa en el abdomen, los vómitos o la anemia de causa no aclarada deben motivar una consulta con su médico lo antes posible.